lunes, 11 de febrero de 2008

¿De qué tengo sed?

El que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de vida gratuitamente. - Apocalipsis 22:17.
A muchos de nosotros nos resulta difícil imaginarnos la situación de una persona que se muere de sed.
En los países de clima templado, es poco probable que alguien lo experimente.
Pero es muy distinto en las extensas zonas desérticas.
Cuando a un viajero se le termina el agua y pierde la esperanza de alcanzar a tiempo un oasis, se apodera de él una angustia mortal: daría todo por un trago de agua.
Y si de manera inesperada recibe ayuda de alguna parte, es para él "agua de vida."
Sin embargo, la humanidad está de viaje y nota cada vez más cuán poco satisfactoria es la vida que se orienta hacia lo visible y lo tangible, cuán falible es una moral que no se funda en Dios y cuán vacía es una vida sin objetivos eternos.
Sólo la fe en el Señor Jesucristo puede saciar nuestra sed de amor, cariño, comprensión, sanidad física, ganas de vivir y de muchas más.
El Señor es una fuente inagotable de amor, paz, salvación y vida eterna.
Él saciara tu alma que es como desierto y la convertirá en un oasis.
***
Si tú eres uno de los que tienen sed en el sentido en el que acabo de escribirte, el "agua de vida" está a tu alcance aunque quizá aún no lo hayas percibido. Porque tal vez Dios me haya puesto en tu camino para ayudarte a superar tu sensación de soledad, de que nadie te ama, de que nadie te comprende, de nunca podrás superar tu enfermedad física que te ha hecho perder las ganas de vivir.
No estás solo, Dios te ama y te comprende como ningún otro podría hacerlo, puede darte la energía necesaria para paliar o quizá hacer desaparecer los males de tu cuerpo. Dios te dio la vida y seguramente hará todo lo necesario para que la disfrutes con paz y prosperidad.
Pero tú debes buscar, conocer y acercarte a Jesucristo. Y tal vez hoy, en este preciso instante, es el momento más oportuno. Porque estás aquí, donde yo también estoy para ayudarte a recorrer el camino que te pondrá muy cerca de ese Amigo que te espera para brindarte su amoroso alivio y aproximarte a Dios.
Escríbeme a elpastordario@hotmail.com . Quiero ser tu amigo y guía en esta maravillosa aventura de ir descubriendo juntos lo que Dios tiene dispuesto para ti. Aprovecha la oportunidad e inténtalo. Te estaré aguardando.

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